Es difícil nadar bien y sobre todo nadar cómodo y seguro si no aprendemos bien los conceptos básicos de la natación.
Parece mentira que todavía vengan a nuestros cursos personas que han pasado por otros cursillos porque no les enseñaron cuestiones básicas como aprender a respirar o a flotar boca arriba y boca abajo o flotar de pie en zona profunda. Casi directamente les enseñaban la técnica de los estilos sin dar tiempo suficiente al aprendizaje de los fundamentos básicos.
Tampoco enseñan habilidades acuáticas, o pasan de puntillas por ellas, como los impulsos, giros, combinaciones, flotaciones verticales, etc.
Saber respirar en el agua es mucho más que echar aire unas cuantas veces por la nariz o por la boca y asunto arreglado. Hay que conocer todas las variables que ofrece la respiración en el agua. Espiración progresiva, apnea inspiratoria expulsando aire de manera progresiva o por golpes de aire, apnea espiratoria, etc. son algunos ejemplos de lo que hay que saber hacer en el agua.
Detalles como conocer la diferencia que existe entre soltar el aire y aguantar la respiración en relación con la flotación y en relación con las inmersiones marcan el camino hacia un buen aprendizaje del dominio del medio acuático.
Saber que no pasa nada si abrimos la boca dentro del agua y que podemos vaciarla sin tener que sacar la boca fuera del agua, que al saltar o al girar debemos soltar aire por la nariz para que no nos entre agua, etc. Estos detalles marcan la diferencia entre un nado incómodo e inseguro y uno cómodo seguro y agradable que es de lo que se trata. De que la natación sea un placer, un disfrute auténtico.
El cuerpo humano reacciona enseguida en cuanto entra en el agua. Cualquier movimiento que hagamos hará que reaccione de una manera o de otra. Tenemos que saber de antemano qué es lo que va a ocurrir cuando hagamos algo porque en el agua estamos en constante equilibrio.
Por ejemplo, si agacho la cabeza al meterla en el agua debo saber cómo va a reaccionar mi cuerpo. Si me sorprende la reacción es que me faltan los conocimientos básicos. Saber cómo va a reaccionar mi cuerpo en cada momento según lo que haga es imprescindible para estar tranquilo y seguro en el agua.
Debemos saber que todos flotamos. Unos más y otros menos en función de una serie de factores ( cantidad de aire en los pulmones, cantidad de tejido adiposo corporal, etc. ). Pero no solo saberlo sino también el porqué flotamos. Son conceptos básicos que debemos conocer.
Conocer el porqué de las cosas nos dará una gran confianza y seguridad. Generalmente, los niños ( según la edad ) no necesitan muchas explicaciones pero los adultos sí las necesitan, por lo que no debemos ser parcos en explicar las cosas cuando haga falta explicarlas a la hora de proponer algunos ejercicios.
Es importante saber el por qué se hacen las cosas de una manera y no de otra porque el conocimiento conceptual del aprendizaje hace que el alumno tome conciencia verdaderamente de lo que está haciendo. Esta toma de conciencia hace que el alumno se sienta plenamente seguro en el agua. Este conocimiento va en dos direcciones, en el correcto uso del propio cuerpo basado a su vez en el conocimiento de cómo «funciona» el agua, es decir, cuáles son los efectos que ejerce el agua, en base a sus características, sobre el cuerpo humano.
Por otro lado, es preciso aclarar que no solo estamos hablando de adultos que tienen miedo al agua sino también de los que no tienen tanto miedo. Todo el mundo debería aprender bien todas las cuestiones básicas referidas al aprendizaje de la natación.
Nadar con una buena técnica de estilos sin tener un buen dominio general del medio acuático es un contrasentido. Nos han venido algunas personas con este problema. No saber girar bien, no saber impulsarse bien, no saber sumergirse bien, no saber flotar de pie bien, etc. Todo esto refleja un deficiente conocimiento de la natación, con lo que difícilmente nadaremos cómodos por muy bien que nademos en cualquier estilo.
Un nado cómodo y seguro se basa en saber porqué reacciona mi cuerpo de una determinada manera en función de lo que hago en cada momento. Solo con ese conocimiento básico podremos nadar tranquilos y estar seguros y cómodos en el agua.
Aprender bien los fundamentos básicos en los que se basa la natación además de nadar correctamente es un camino seguro hacia el dominio del medio acuático y el pleno disfrute de la natación, basada en la plena confianza y la seguridad en uno mismo.
– Espero que te haya sido útil este artículo y nuestra web al saber que puedes constatar, paso a paso, con nuestro MÉTODO NSM ( que incluye 3 flotaciones verticales ) cómo vas venciendo tu propio miedo al agua y, al mismo tiempo, ir comprobando cómo vas disfrutando cada vez más y mejorando tu dominio del medio acuático.
– Puede que tengas algún centro de natación cerca pero si no estás seguro de lo que ofrecen o no te convencen sus condiciones pregúntanos cualquier duda que tengas, y si quieres apuntarte a nuestros cursos puedes hacerlo en cualquier momento del mes en curso o de la temporada.
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Muchas gracias por tu atención
Yo creo que en las piscinas públicas requieren a profesionales como tu, con motivación, grupos reducidos y nunca masificados, paciencia y con una metodología de trabajo única (NSM nadar sin miedo). Muchas clases pasan de alto la enseñanza de algo vital como la correcta respiración y la flotación.
Efectivamente Judith. Se le da mucha la importancia a la técnica y poca a las cuestiones básicas, cuando lo segundo depende de un buen dominio de lo primero. Gracias por tu respuesta y tu interés Judith.